LA AGRICULTURA BIOLOGICO DINAMICA UNA REAL CONTRIBUCION AL CULTIVO DE LA TIERRA. | ||||
Cada vez son más las personas que comprueban a través de propias experiencias y en base al mejor conocimiento de las leyes que interactúan en el medio ambiente, la constante amenaza y destrucción de la naturaleza. Contaminación de ríos, lagos, mares, bosques enfermos, la puesta en peligro de las fuentes de agua potable, la contaminación de la atmósfera, el hoyo de ozono y el cambio climático son por así decirlo, algunos puntos centrales de discusión. Todos conocemos los
orígenes de esta situación: |
Pero las verdaderas
causas de este fenómeno, que destruye la vida de la tierra, se arraigan en
las características de nuestra actual sociedad: en la lucha de los actores
de la economía Productores y Consumidores- para quienes el provecho
económico personal está en primer lugar. A menudo sin considerar ni pensar
en las consecuencias futuras se actúa sólo desde los más puros motivos
materiales. En más, sufre la parte que menos puede defenderse: la
naturaleza. A ésta se la irá grabando con el peso de tener la obligación
de entregar siempre bienes cada vez más baratos. Lo que percibimos
externamente de la contaminación ambiental corresponde por lo tanto
también al resultado de la actividad y condiciones que se generan al
interior de nuestra sociedad. La agricultura
biológico-dinámica (también llamada biodinámica) corresponde a un
movimiento mundial, en donde cada vez son más los trabajadores agrícolas
que en base a las normas económicas que en esta técnica se desarrollan,
logran unir la idea de la comercialización, la del desarrollo organizado y
la de la investigación, intentando a la vez sobrepasar la pura visión
material de las cosas. Buscan lo espiritual y anímico en la naturaleza y
el hombre, para hacerla finalmente parte de sus propias vidas. Ellos se
proponen una defensa del medio ambiente y una producción equilibrada de
alimentos para el hombre. Los productos son conocidos en Europa bajo la
marca DEMETER. El Sistema biológico dinámico se puede, con todo derecho, identificar como el
más antiguo de los métodos ecológicos aplicados a la agricultura. Su
sentido espiritual fue dado por Rudolf Steiner, fundador de la
antroposofía en el año 1924 (Alemania). Considera la tierra, sobre la cual
vive el hombre, los animales y crecen las plantas, no como la suma de
fuerzas físicas y químicas sino como un organismo vivo y animado. El
hombre está llamado a configurar este organismo desde el conocimiento.
Esta labor fue desarrollada a través de siglos por los agricultores. Con la
industrialización de la agricultura pareció ser posible olvidar las leyes
de la agricultura tradicional, más que nada, sin tomar en cuenta a la
naturaleza y al hombre. Sobre todo, con la idea de aumentar constantemente
la producción se aplicó abono mineral, el que además de provocar en las
plantas susceptibilidad a las enfermedades e infecciones parasitarias,
creó la necesidad de nuevas aplicaciones protectoras con venenos
específicos. Los altos rendimientos crearon con el tiempo un nuevo
problema, conocido como la sobreproducción de alimentos en el mundo
occidental. En la agricultura biológico-dinámica se obtiene estiércol y compost en base al manejo de los
animales en el predio, junto a los llamados preparados para compost
fabricados de plantas específicas, base fundamental de los abonos
orgánicos. Existen además otros
preparados, denominados preparados para campo descritos por Rudolf
Steiner, los que aplicados a las plantas y/o al terreno en tiempos
precisos conducen a la producción de plantas con buen sabor, mejor
consistencia a la vez que permiten observar una constante mejoría del
suelo. Los preparados tienen ante todo una adecuada acción "armonizadora".
Su aplicación se indica cuando se desea manejar el predio de manera
biológico-dinámica y los productos deben ser certificados por DEMETER.
Paralelamente, para cuidar el suelo y manejar plantas sanas, se lleva a
cabo una variada rotación de cultivos junto a la aplicación del abono
orgánico. Los cultivos de trébol y alfalfa llevan el nitrógeno del aire al
suelo y aseguran también un adecuado equilibrio de la balanza de nitrógeno
sin la aplicación de abonos químicos sintéticos. En lugar de la
aplicación de pesticidas y herbicidas químico sintéticos se actúa a través
de otras medidas prácticas que permiten evitar el daño de plagas y
enfermedades y en el caso de emergencias aplicar un medio de tipo
biológico. Por ejemplo, una rotación y cultivo planificado del suelo en
unión a procedimientos mecánicos (cultivar, escardar) y térmicos
(flameado) permite en la mayoría de los casos el control de la maleza. El
forraje para el ganado se obtiene en el mismo predio. Lo que sigue,
corresponde a la mantención de setos y árboles en donde puedan
establecerse las aves y los pequeños animales que normalmente habitan el
lugar. En realidad se pretenderá una gran variedad de plantas y animales
de manera que las diferentes formas de vida se puedan desarrollar de
manera adecuada. El agricultor llega a ser así también un cultivador del
paisaje. Resultado: Las importaciones de productos proteicos por los países del tercer mundo se
hacen con este método innecesarias. Se puede saciar mejor el hambre
empleando, como en otros países, el excedente de producción. El temor de
retroceder a una agricultura medieval al dejar de lado los abonos
nitrogenados sintéticos es infundado. Por el contrario, se puede ayudar
con medidas y técnicas biológico-dinámicas a sanar una economía agraria
enferma. El contenido de humus
en el suelo experimenta un aumento y estabilización. El estiércol y los
purines se hacen compatibles con las plantas a través de los preparados
biológico-dinámicos y en las empastadas aparecen nuevamente muchas hierbas
y tipos de tréboles. Esto no corresponde sólo a un enriquecimiento de la
alimentación y salud de los animales, sino también del paisaje y esto a su
vez, para el goce del hombre. Es seguro que ya más de alguien ha
comprobado por sí mismo que las verduras o las frutas que se han producido
de esta manera poseen en vez de perder, buen sabor y un sorprendente nuevo
nivel de energía. La vitalidad de las plantas que de esta manera se
obtienen contribuyen con su salud a la salud de los hombres que las
consumen. En la mayoría de las
empresas biológico-dinámicas se han desarrollado ejemplos de nuevas formas
de vida y de trabajo comunitario. Además de la comunidad familiar, existen
hoy empresas, granjas y localidades agrícolas, donde se aplica el trabajo
conjunto y en las que se da y se busca un nuevo impulso cultural. El modo de la
economía bíológico-dinámica es por lo tanto una real contribución a la
organización de la vida sobre la tierra. Ella obra curando y cultivando al
suelo, las plantas, los animales y al hombre. |