LA AGRICULTURA BIOLOGICO DINAMICA UNA REAL CONTRIBUCION AL CULTIVO DE LA TIERRA.      

Cada vez son más las personas que comprueban a través de propias experiencias y en base al mejor conocimiento de las leyes que interactúan en el medio ambiente, la constante amenaza y destrucción de la naturaleza. Contaminación de ríos, lagos, mares, bosques enfermos, la puesta en peligro de las fuentes de agua potable, la contaminación de la atmósfera, el hoyo de ozono y el cambio climático son por así decirlo, algunos puntos centrales de discusión.

Todos conocemos los orígenes de esta situación:
-"La Industria". Requiere gran cantidad de energía y su forma de obtención generalmente provoca emisión de sustancias nocivas.
-"Los Ensayos Agrícolas". Fomentan el empleo de abonos químico-sintéticos y pesticidas para hacer más rentable la economía agraria.
-"La Actividad Doméstica". Se suma por un lado con el automóvil y el calentamiento del aire, y por el otro, con los cerros de basura que alteran las aguas subterráneas.

 

Pero las verdaderas causas de este fenómeno, que destruye la vida de la tierra, se arraigan en las características de nuestra actual sociedad: en la lucha de los actores de la economía Productores y Consumidores- para quienes el provecho económico personal está en primer lugar. A menudo sin considerar ni pensar en las consecuencias futuras se actúa sólo desde los más puros motivos materiales. En más, sufre la parte que menos puede defenderse: la naturaleza. A ésta se la irá grabando con el peso de tener la obligación de entregar siempre bienes cada vez más baratos. Lo que percibimos externamente de la contaminación ambiental corresponde por lo tanto también al resultado de la actividad y condiciones que se generan al interior de nuestra sociedad.

La agricultura biológico-dinámica (también llamada biodinámica) corresponde a un movimiento mundial, en donde cada vez son más los trabajadores agrícolas que en base a las normas económicas que en esta técnica se desarrollan, logran unir la idea de la comercialización, la del desarrollo organizado y la de la investigación, intentando a la vez sobrepasar la pura visión material de las cosas. Buscan lo espiritual y anímico en la naturaleza y el hombre, para hacerla finalmente parte de sus propias vidas. Ellos se proponen una defensa del medio ambiente y una producción equilibrada de alimentos para el hombre. Los productos son conocidos en Europa bajo la marca DEMETER.

El Sistema biológico dinámico se puede, con todo derecho, identificar como el más antiguo de los métodos ecológicos aplicados a la agricultura. Su sentido espiritual fue dado por Rudolf Steiner, fundador de la antroposofía en el año 1924 (Alemania). Considera la tierra, sobre la cual vive el hombre, los animales y crecen las plantas, no como la suma de fuerzas físicas y químicas sino como un organismo vivo y animado. El hombre está llamado a configurar este organismo desde el conocimiento. Esta labor fue desarrollada a través de siglos por los agricultores.

Con la industrialización de la agricultura pareció ser posible olvidar las leyes de la agricultura tradicional, más que nada, sin tomar en cuenta a la naturaleza y al hombre. Sobre todo, con la idea de aumentar constantemente la producción se aplicó abono mineral, el que además de provocar en las plantas susceptibilidad a las enfermedades e infecciones parasitarias, creó la necesidad de nuevas aplicaciones protectoras con venenos específicos. Los altos rendimientos crearon con el tiempo un nuevo problema, conocido como la sobreproducción de alimentos en el mundo occidental.

En la agricultura biológico-dinámica se obtiene estiércol y compost en base al manejo de los animales en el predio, junto a los llamados preparados para compost fabricados de plantas específicas, base fundamental de los abonos orgánicos.

Existen además otros preparados, denominados preparados para campo descritos por Rudolf Steiner, los que aplicados a las plantas y/o al terreno en tiempos precisos conducen a la producción de plantas con buen sabor, mejor consistencia a la vez que permiten observar una constante mejoría del suelo. Los preparados tienen ante todo una adecuada acción "armonizadora". Su aplicación se indica cuando se desea manejar el predio de manera biológico-dinámica y los productos deben ser certificados por DEMETER. Paralelamente, para cuidar el suelo y manejar plantas sanas, se lleva a cabo una variada rotación de cultivos junto a la aplicación del abono orgánico. Los cultivos de trébol y alfalfa llevan el nitrógeno del aire al suelo y aseguran también un adecuado equilibrio de la balanza de nitrógeno sin la aplicación de abonos químicos sintéticos.

En lugar de la aplicación de pesticidas y herbicidas químico sintéticos se actúa a través de otras medidas prácticas que permiten evitar el daño de plagas y enfermedades y en el caso de emergencias aplicar un medio de tipo biológico. Por ejemplo, una rotación y cultivo planificado del suelo en unión a procedimientos mecánicos (cultivar, escardar) y térmicos (flameado) permite en la mayoría de los casos el control de la maleza. El forraje para el ganado se obtiene en el mismo predio. Lo que sigue, corresponde a la mantención de setos y árboles en donde puedan establecerse las aves y los pequeños animales que normalmente habitan el lugar. En realidad se pretenderá una gran variedad de plantas y animales de manera que las diferentes formas de vida se puedan desarrollar de manera adecuada. El agricultor llega a ser así también un cultivador del paisaje.

Resultado: Las importaciones de productos proteicos por los países del tercer mundo se hacen con este método innecesarias. Se puede saciar mejor el hambre empleando, como en otros países, el excedente de producción. El temor de retroceder a una agricultura medieval al dejar de lado los abonos nitrogenados sintéticos es infundado. Por el contrario, se puede ayudar con medidas y técnicas biológico-dinámicas a sanar una economía agraria enferma.

El contenido de humus en el suelo experimenta un aumento y estabilización. El estiércol y los purines se hacen compatibles con las plantas a través de los preparados biológico-dinámicos y en las empastadas aparecen nuevamente muchas hierbas y tipos de tréboles. Esto no corresponde sólo a un enriquecimiento de la alimentación y salud de los animales, sino también del paisaje y esto a su vez, para el goce del hombre. Es seguro que ya más de alguien ha comprobado por sí mismo que las verduras o las frutas que se han producido de esta manera poseen en vez de perder, buen sabor y un sorprendente nuevo nivel de energía. La vitalidad de las plantas que de esta manera se obtienen contribuyen con su salud a la salud de los hombres que las consumen.

En la mayoría de las empresas biológico-dinámicas se han desarrollado ejemplos de nuevas formas de vida y de trabajo comunitario. Además de la comunidad familiar, existen hoy empresas, granjas y localidades agrícolas, donde se aplica el trabajo conjunto y en las que se da y se busca un nuevo impulso cultural.

El modo de la economía bíológico-dinámica es por lo tanto una real contribución a la organización de la vida sobre la tierra. Ella obra curando y cultivando al suelo, las plantas, los animales y al hombre.